La fijación biológica del nitrógeno se ha convertido en un factor esencial de suministro para los cultivos de leguminosas como la soja, que requieren cada vez mayor cantidad de nitrógeno para su correcto desarrollo. Si no conocés los aportes específicos que provee a la producción agrícola, no te pierdas este artículo.
Importancia del nitrógeno en las plantas
El nitrógeno, al igual que otros nutrientes y factores naturales, son imprescindibles para una buena producción de los cultivos dada su importancia fundamental en el proceso de fotosíntesis. Cuando hablamos de fijación biológica de nitrógeno, nos referimos a la transformación del N2 (nitrógeno atmosférico no reactivo) en NH4+ que es incorporado a compuestos orgánicos como los aminoácidos y cuyo proceso biológico puede ser realizado por los organismos que poseen la enzima nitrogenasa y que son consumidores del N2.
La información científica de los últimos años ha demostrado que los vegetales capaces de realizar la fijación biológica del nitrógeno son aquellas especies de leguminosas (soja, alfalfa, porotos, trébol, etcétera) en simbiosis con bacterias del género Rhizobium que infectan las raíces provocando nódulos capacitados para obtener el nitrógeno del aire, transformarlo y asimilarlo en forma de amonio para que sea incorporado a las proteínas de los vegetales.
Algunas especies bacterianas de Rhizobium son: Mesorhizobium, Azorhizobium, Bradyrhizobium todas compatibles con plantas leguminosas. Para condiciones tropicales y subtropicales, la especie Bradyrhizobium es la más comúnmente utilizada.
Beneficios de la fijación biológica del nitrógeno
Existen grandes ventajas económicas y biológicas que los productores agropecuarios pueden obtener mediante la fijación biológica del nitrógeno en sus cultivos. Los estudios científicos destacan las siguientes:
Crecimiento en suelos con baja fertilidad
Aquellas plantas que provocan nódulos capaces de fijar el nitrógeno, pueden crecer perfectamente en suelos con baja fertilidad y cuya producción agrícola requiere menores cantidades de fertilizantes nitrogenados para la supervivencia. Esto permite una notable reducción de los costos de producción y del impacto ecológico en el ambiente, de acuerdo a un estudio reciente
Mejora la fertilidad
Conocer el aporte de esta simbiosis biológica permite la mejora de la fertilidad del sistema de producción y, consecuentemente, un mayor alcance de los logros y estabilidad del mismo.
Mejora la planificación estratégica
Los avances científicos demuestran que el cultivo de la soja requiere un promedio de 80 kg de nitrógeno para poder producir al menos una tonelada de granos. Este conocimiento, como tantos otros, permite una mejora en la planificación estratégica del manejo de los nutrientes y potenciación del proceso de fijación biológica de nitrógeno en los sistemas de producción agrícola.
Las ventajas son indiscutibles y el problema que surge para los productores está determinado por la falta de los rizobios en los suelos o la presencia en cantidad inadecuada, lo cual imposibilita el proceso de simbiosis para la fijación del nitrógeno.
La solución reside en la introducción artificial de los microorganismos mediante la práctica de la inoculación de semillas que, además de favorecer la simbiosis, posee un bajo costo para la economía del productor. Es fundamental en la agricultura moderna realizar una buena inoculación para garantizar la fijación biológica de N en la soja y otras leguminosas. El retorno que obtiene el productor frente al bajo costo de esta práctica es muy significativo.
Cabe recordar que el inoculante agrícola que será aplicado ha de concentrar las bacterias específicas para la leguminosa que será cultivada y deberá colocarse poco antes de la siembra para que la formación de los nódulos sea efectiva.
Como podemos comprender, la fijación biológica del nitrógeno se constituye en un proceso fundamental para obtener una buena producción y así maximizar la eficiencia de la práctica agrícola ahorrando costos importantes de fertilizantes nitrogenados. Sin dudas ha de ser una forma eficaz de proteger los altos costos productivos protegiendo el medio ambiente.