La plaga de langostas es una amenaza frecuente que perjudica los cultivos de los productores, sus campos de pastoreo y también a los montes naturales de nuestro país. Durante el año 2017/2018 se ha producido en varios países sudamericanos, incluido Paraguay, una infestación de estos insectos que arribó a la alerta de su control para evitar los daños que normalmente producen.
En el sector agrícola no es novedoso que la plaga de langostas se constituya como una de las mayores preocupaciones de los productores ya que posee la capacidad de consumir grandes cantidades de cultivos que equivalen al alimento que requieren más de 2000 personas en tan solo un día.
La clave para combatirla reside en la identificación temprana de los focos en los estadios juveniles para disminuir la reproducción, evitar que las colonias se dispersen y mermar significativamente el nivel poblacional de estos insectos.
Si bien los organismos Nacionales vinculados al sector agropecuario deben mantenerse activos en el control de cualquier tipo de plagas, el rol de los productores, en cuanto al monitoreo e identificación a tiempo, es fundamental. Se trata de un trabajo conjunto y cooperativo entre el sector público y privado para evitar los desastres que causan estos insectos en la producción.
Controles óptimos para la plaga de langostas
De acuerdo a numerosos ensayos e investigaciones, el control óptimo de este tipo de plagas debe realizarse en el estadio ninfal por ello es tan importante el monitoreo recurrente.
Sin embargo, cuando no pudo contenerse inicialmente y el foco se ha diseminado a lo largo del lote, es importante realizarlo en todos los estadios para frenar el aumento poblacional.
Como podemos comprender, dependiendo del estadio en el cual se encuentre el insecto, el control será más específico.
- En casos donde se observe la existencia de huevos de langostas en el suelo (suelen oviponer entre 80 y 120 huevos cada vez) el tratamiento suele ser más complejo pero no por ello imposible.
Se deberá proceder a la marcación de los sitios donde se halle la postura y realizar un control temprano durante el nacimiento mediante la pulverización con insecticidas adecuados para las plagas de langostas. En determinados casos es posible realizar labores mecánicas para exponer los huevos a la superficie, evitando su desarrollo.
- Durante el estado juvenil (ninfas) el control puede realizarse de manera eficiente en forma terrestre ya que no poseen capacidad de vuelo o aérea cuando se cuenta con sitios abiertos para una mayor eficacia. El empleo de productos como el Fipronil ha demostrado tener buenas incidencias en el manejo de este y otro tipo de plagas
El monitoreo permite la detección de estos estadios tempranos y, a consecuencia, una mayor eficacia en el manejo debido a que se trata de etapas sensibles, cuya mortalidad natural de los insectos es corriente así como también su agrupación en zonas.
El empleo de fitosanitarios a través de pulverizadoras de arranque pueden ser equipos terrestres decisivos para un correcto control de la plaga.
- Para el estado adulto se recomienda la pulverización aérea mediante una manga asentada o terrestre empleando cañones que contemplen bordes o cortinas. Debido a que la ventana de aplicación es reducida, se deberá trazar un polígono para determinar el espacio donde se realizará la aplicación del día siguiente a primeras horas de la mañana con el fin de efectivizar los resultados del producto aplicado.
De acuerdo al estudio realizado por SENASA en conjunción con autoridades e instituciones el agro de países sudamericanos, la dosis de referencia y los productos autorizados para el control de plagas de langostas pueden visualizar en el siguiente cuadro:
PRINCIPIO ACTIVO | gp.a./ha |
Cipermetrina | 62,5 |
Deltametrina | 12,5 |
Lambdacialotrina | 25 |
Fipronil | 4 |
Diflubenzuron | 30 |
En conclusión, el monitoreo responsable para la correcta detección temprana de la plaga de langostas constituye la clave para poder arribar a un control exitoso y minimizar los riesgos que ésta genera en la producción y los rindes del cultivo.